Biografías
Antonieta Rivas Mercado (1900 - 1931)
 

Nació en la Ciudad de México el 28 de abril de 1900.

Es hija de Antonio Rivas Mercado, arquitecto mexicano cuya obra más importante fue el monumento del Ángel de la Independencia.

Desde pequeña estuvo en contacto con intelectuales y artistas, ya que su padre fue director de la Academia de San Carlos. En su casa en la calle de Héroes de la colonia Guerrero, Antonieta vive intensamente los últimos años del régimen de Porfirio Díaz, la Revolución y el México nuevo. Viaja a Europa por primera vez cuando acompaña a su padre a París para supervisar los últimos detalles de las esculturas para el monumento de la Independencia.

Durante ese viaje conoce los museos más importantes y asiste al ballet, la ópera y el teatro. Estudia inglés y francés y llega a dominar ambos idiomas. Durante los años más difíciles de la Revolución, Antonieta vive en Europa y conoce el teatro de vanguardia, al volver a México, muere su padre y Antonieta hereda una gran fortuna.

Es amiga de importantes pintores como Diego Rivera y Manuel Rodríguez Lozano. Con ese gran entusiasmo que muestra por la cultura, establece en su nuevo domicilio en la colonia Roma los salones literarios y después con el grupo de escritores llamado los "Contemporáneos" funda el teatro Ulises, en 1928, donde presentan por primera vez en México el llamado teatro experimental.

Antonieta patrocina, traduce las obras, actúa en ellas y algunos has señalado sus dotes de actriz y su extraordinaria voz. También patrocina una orquesta, que más tarde sería la Sinfónica Nacional. Conoce a José Vasconcelos y se incorpora a su campaña política por la presidencia de la República. Escribe la crónica de la Campaña y se piensa que también escribió varios de los discursos del candidato. En esta campaña gasta la mayor parte de su fortuna. En 1929 Vasconcelos es derrotado y Antonieta Rivas se exilia en los Estados Unidos.

Escribe varios artículos, y en Nueva York conoce a Federico García Lorca, quien le toma aprecio de inmediato. Más tarde viaja a París donde escribe para ganarse la vida, casi no tiene fondos y vive en condiciones muy austeras. Antonieta padecía de crisis depresivas, al parecer a consecuencia de un accidente; en París, el 11 de febrero de 1931 después de reunirse con José Vaconcelos, se suicidó, dentro de la catedral de Notre Dame, y con la pistola que Vasconcelos siempre traía consigo.

Además de su gran labor como mecenas y promotora del arte en México, Antonieta fue una escritora moderna, de vanguardia, sus artículos son de gran calidad y es la promotora de la literatura feminista en el país; si hubiera dedicado más tiempo a su labor literaria, seguramente sería una de las grandes escritoras de este siglo.